"A lo mejor la vida solo consta de disfrutar de los pequeños momentos."

23 de noviembre de 2013

Tantas cosas y ni una sola.

Cadena huida con agallas rotas. Pulseras arrancada y collares del revés. Pintauñas naranja a conjunto con el sol. Del revés o del derecho, contrapuesto o simple y compuesto. Ojeras a trescientos kilómetros. Ciento ochenta minutos hacia atrás, trescientos hacia delante. Colorante de marrón anclado al huésped de la primera planta y me llaman a mi hipócrita. Alimentos azules, morados, de verdes hasta rojos pasando por marrón.

Suena tan extraño como contar cinco veces cinco. Me equivoco y vuelvo a empezar. Comenzando por el simple método de retroceder. Cincuenta de cada cien personas tocan la guitarra en este momento, acorde tras acorde y compuesta está la canción. Sueño con estar ahí leyendo un libro teniendo al rededor más de veinte niños, escribir historias de princesas hasta de dinosaurios. Aquella señora de vestido morado conduce un coche de gama alta y se siente más libre que aquel pequeño pájaro que aprende a volar a los diez días de nacer. 

Te das cuenta que cada persona saca su momento a la luz de noche y lo recubre de pequeñas tiras de colores dorados. Suena bien pero también triste y hoy soy yo la que la toca tirar para delante con aquellos secretos que destellan con luz propia. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario